Smile. Cuando las canciones surgen solas.
John Franks es conocido en Getxo por ser el cantante británico de la banda Smile. Llevan entre discos y escenarios desde el 2007. Al principio, el público los conoció por sus temas con toques sixties, algo más clásicos. Son el perfecto ejemplo de buen rollo, ganas de bailar y melodías pegadizas.
‘I’m gonna keep standing up’ es vuestro nuevo EP autoeditado. Ha salido el 15 de febrero y ya estáis inmersos en vuestra nueva gira…¡Sí, es genial tenerlo ya en la calle! Después del último disco, como con todo en la vida, uno se crea unas expectativas y hay veces que no se cumplen. Pones toda tu energía en hacer algo importante, a nivel creativo…, pero te das cuenta, con el tiempo, de que es muy difícil.
Estas nuevas canciones surgen de “un momento de crisis”, de querer dejarlo todo y de sentir que sales más fuerte tras ganar la batalla. Hay veces que como grupo sientes que no avanzas como te habías planteado, tanto a nivel económico como personal. Teniendo esta sensación, las canciones surgen solas. Así ha nacido el EP, con los cuatro temas, tan diferentes entre sí. Si te digo la verdad, lo que nos mueve como músicos es la pasión que sentimos por lo que hacemos y somos felices al estar haciendo lo que más nos gusta hacer en el mundo y es MÚSICA, por eso no podíamos dejarlo.
¿Y cómo nació la primera canción, que da título al álbum, tras este momento de reflexión? Nació de mí y de mi guitarra; después de que surja la idea, siempre le damos forma entre todos ¡y queda algo guay! ‘I’m gonna keep standing up’ dice cosas como “me queda una bala”, porque todavía tenemos ganas de seguir haciendo música y nos queda una bala en la recámara. ¿Quién no ha tenido ganas de abandonar alguna vez? ¡Pero después te recuperas y quieres darlo de todo de nuevo!
La canción ‘All night’ es más disco, de esos temas de Smile que nos quieren hacer bailar, ¿verdad? ¡Sin duda! Es una crítica de la gente que vemos en los festivales que parece que sólo se anima si ponen su canción preferida para bailar (risas). A decir verdad, los festis están llenos de esa gente y nos da pena, porque parece que esa gente determina la marcha de un festival… Son los típicos que si para las diez de la noche no les das ‘mambo’ para bailar ¡se piran! Por eso nuestro tema tiene toques sesenteros y es algo reivindicativo.
‘What could you expect from a guy’ es muy alegre, estilo ‘City girl’ y te transporta a otro lugar...Con esta canción, me di cuenta de que el subconsciente me mandaba un mensaje. Y hacerle caso es una manera bonita de crear una canción… ¡Las canciones nos dicen más cosas ellas a nosotros que nosotros a ellas! En este tema, intento hablar del mundo instagramer. Es ‘visualmente bonito’, pero la realidad no es la misma, ¡tal y como son las redes sociales!
¡Y ‘Pum Pum Pum’ es vuestra primera y única canción en castellano! Y encima, colaboráis con Depedro, ¿qué tal la experiencia? La canción nació en inglés, como todas las canciones que escribo, me sale escribir en mi idioma. Pero este tema era diferente… ¡tenía mucho sabor latino y decidimos hacer la letra en castellano! Con Depedro de maravilla y queda un contraste bonito. Le añadimos palmas, percusión… y quedó genial. ¡Es un EP ecléctico, sin duda!
El hecho de ser inglés, ¿hace que todos tus referentes musicales sean anglosajones? Absolutamente todos (risas). Me he criado con esa música y esos grupos. Lo que pasa es que vas conociendo grupos y coincidiendo con ellos cuando giras y me van gustando más grupos en castellano… como por ejemplo, Rufus T. Firefly, León Benavente, Sidonie, Jero Romero de los Sunday Drivers…
Y si tuvieras que elegir una banda favorita, ¿cuál sería? Imposible elegir solo una (risas). He crecido con la música de los 60 y te diría que… ¡The Beatles!
¿Y una canción? Me lo pones difícil… ¡Pero me encanta ‘God only knows’ de The Beach Boys!
«Inglaterra la llevo en el corazón, pero ahora soy un mix y me siento más de aquí. Siempre que voy, vuelvo con ganas de quedarme en Getxo. Es un pueblo cerca de todo y al lado del mar y aquí, aunque parezca increíble, hay mejor tiempo «.
Siempre habéis ido de la mano del productor musical Saúl Santolaria, ¡y ahora Antonio Garamendi es el co-productor! Seguimos donde Saúl y este EP ha sido producido por Antonio. ¡Los arreglos son todos de Antonio y son muy 90’s! Él sigue con nosotros tocando y se viene de gira como teclista. Garamendi es un gran músico y nos alegra tenerle con nosotros.
¿Qué nos podéis adelantar de esta gira? ¡Estaremos en muchos sitios! De momento hemos tocado ya en Barcelona, Zaragoza, Sevilla, Toledo y Gijón. ¡Siempre a gusto y muy contentos! Nos quedan Bilbao, Donosti, Alicante, Valencia…
¿Qué os aporta estar en los escenarios? Tenemos una cosa especial cuando tocamos en un escenario: comunicarnos con el público. Siempre hemos querido romper esas barreras: tratar al público y dirigirnos a él como si fuera una persona. La diferencia de Smile frente a otras bandas puede ser que no somos distantes al subirnos al escenario; ¡intentamos mantener esa cercanía siempre!
Llevando desde el 2007 como banda, ¿cómo consigue Smile ser un grupo de Getxo que se mantiene en lo más alto a lo largo de los años? La pasión por lo que hacemos. Tenemos suerte y seguimos ahí. Ya tenemos a nuestra espalda cuatro giras por España y muchos festivales. Mantenerlo es un esfuerzo, pero se convierte en un gusto. Siempre que tocamos volvemos a casa emocionados. Hay que ser realistas; sabemos lo que es que cinco tíos puedan alquilar una furgo, irse a tocar, llenar un sitio, comer, dormir, hacer kilómetros y volver a casa con algo de dinero en el bolsillo, ¡como una banda de rock! Muchas veces tocar fuera no sale rentable, ¡pero seguimos haciéndolo porque la música es lo que nos mueve!
“El surf, entre semana, y la música, los fines de semana”. ¿Ese es tu lema, John? ¡Es mi fórmula perfecta! El surf es más complaciente que la música, porque estás tú solo en el mar, no dependes de nadie. En el grupo tenemos cinco puntos de vista distintos… (risas)
Vuestra energía y vuestra vitalidad os representan. ¡Normal que os llaméis Smile! ¡Sí! Smile nacimos siendo super clásicos, más rock sixty. El último disco es más contemporáneo y queremos huir de esa etiqueta de ‘clásicos’. ¡Y seguimos con la misma energía!
Si no hubieras sido músico, ¿a qué te habrías dedicado? Hice Bellas Artes y desde siempre he necesitado desarrollar mi parte creativa de algún modo. Antes pintaba y ahora centro mi atención en la música.
¿Y cómo llevas la vida de aita y músico? A vuestros conciertos van niños, aitas, jóvenes, mayores… ¡y todos se ponen a bailar! Se lleva bien. Cuando compongo, siempre pienso en cómo va a reaccionar la gente con mis canciones… ¡y si se ponen a bailar, genial! Tenemos un público muy variado y te das cuenta de que llegas a todos los nichos. La moraleja de todo esto es que yo estaba equivocado al tener ese momento de crisis y pensé en abandonar la música; ¡pero sólo tenía que dejarme llevar y disfrutar del camino!
¿Qué te aporta viajar? Te saca de tu zona de confort y de tu rutina, lo cual es indispensable. Los domingos que vuelvo de tocar el fin de semana, ¡vuelvo con más ganas!
¿Podrías elegir entre Getxo e Inglaterra, tu país natal? Inglaterra la llevo en el corazón, pero ahora soy un mix y me siento más de aquí. Siempre que voy, vuelvo con ganas de quedarme en Getxo. Es un pueblo cerca de todo y al lado del mar y aquí, aunque parezca increíble, hay mejor tiempo (risas), en Inglaterra el agua está a 6º y aquí al doble, ¡en el surf hay que tenerlo en cuenta! Texto de Ángela Saiz.