Las Odio. Las vimos primero.
Con su primer LP ,‘Futuras esposas’, el grupo de Madrid ha destacado por sus canciones pegadizas que combinan acidez, sentido del humor y un mensaje feminista. Las autoras del ‘Indiespañol’ vienen a BBK Live mientras se preparan para nuevos proyectos.
‘Futuras esposas’ ha tenido muy buen recibimiento en los medios. ¿Os ha sorprendido el éxito? Nos ha sorprendido mucho. Venimos de grupos de música emergentes y muy under, con un público muy cercano y formado en su mayor parte por gente conocida. Con Las Odio hemos tenido una visibilidad y hemos recibido una atención que no esperábamos, no sólo en los medios de comunicación, sino también a nivel de público, programadores, etc. Hemos sentido mucho cariño en ese sentido.
Todas las canciones del álbum son pegadizas. ¿Es más difícil de conseguir de lo que parece? Cuando componemos no tenemos en la cabeza crear canciones pegadizas, pero es un gusto ver que cuando las sacas del local y las compartes con el público la gente se las aprende, las canta…Supongo que cuando haces canciones lo haces pensando en que te gusten a ti y en que conecten contigo misma, y el hecho de que después le puedan gustar al público es algo que en realidad no está demasiado presente en el proceso de composición, sino que tal vez nos lo planteamos después, cuando ya las hemos tocado en el escenario y podemos ver las reacciones de la gente.
Con el nombre Las Odio (genial), ¿os anticipáis a las críticas? Si, así es. Aunque como decíamos, hemos tenido muy buena aceptación, también somos conscientes de que el grupo puede levantar ampollas, y es nuestra intención, en parte. Estamos ocupando un sitio que, dentro del sistema patriarcal, no nos corresponde. Como mujeres estamos predestinadas a ocupar un papel pasivo, complaciente, siempre secundario, siempre bajo la mirada masculina… y no nos da la gana conformarnos con nada de eso. De hecho, no queremos que ninguna mujer se vea obligada a asumir ese papel y esa es una de las motivaciones del grupo: cuestionar los roles y estereotipos de género. Si eso nos hace molestas, bienvenido sea. Odiadnos <3.
En vuestros temas se percibe un gusto por lo clásico ¿tenéis querencia por la música de décadas pasadas? En realidad tenemos querencia por la música de todo tipo y eso se nota en las canciones, claro, pero no nos etiquetaríamos como banda de vocación revival. Sí que es cierto que este disco tiene un sonido garage sixties y además la producción es bastante clásica, pero luego en directo tenemos un sonido más variado.
«Somos conscientes de que el grupo puede levantar ampollas, y es nuestra intención, en parte. Estamos ocupando un sitio que, dentro del sistema patriarcal, no nos corresponde. Esa es una de las motivaciones del grupo: cuestionar los roles y estereotipos de género. Si eso nos hace molestas, bienvenido sea. Odiadnos <3».
‘Blackout’ y ‘Batman corazón Robin’ tienen unos teclados muy retro, que podrían quedar bien como banda sonora de una peli de terror o de un filme sesentero, ¿de dónde viene esa inspiración? Un poco de lo mismo, ahí sí bebemos conscientemente de las bandas de garage se los sesenta, aunque las toquemos con sintetizador Korg en vez de usar un Hammond o Farfisa. Es un sonido que nos gusta mucho, porque es pop pegadizo pero sin dejar de sonar bastante cacharrero y descontrolado.
Os movéis entre varios géneros como el punk y el pop, ¿os gusta alternar lo dulce con lo cañero? En el grupo todas contamos con muy diversas influencias y eso se refleja en la composición de las canciones, que son un cóctel de gustos que van desde los ritmos más oscuros hasta los sonidos garageros, pasando por el grunge o el pop, entre otros.
‘Yo lo vi primero’, ‘A tu ritmo’ e ‘Indiespañol’ tienen unas letras bastante críticas, ¿tan mal anda el mundillo? En realidad todas las letras del disco tienen un enfoque menos amable de lo que pueda esperarse en una canción de pop. No es porque el mundillo esté mal, es que tenemos una forma bastante ácida de afrontar los conflictos que nos rodean, que son muchos y variados, claro (precariedad, futuro incierto, machismo, homofobia, capitalismo salvaje, etc). Podríamos hacer canciones tristes sobre estos temas, pero eso sería impropio de nuestro carácter.
Vuestro tema más icónico tal vez sea ‘Indiespañol’ que contiene una clara reivindicación sobre el ninguneo a los grupos femeninos de una forma ácida pero divertida. ¿Creéis que el humor es útil para que cale el mensaje? Este es el tono en que más cómodas nos sentimos, lo que nos sale natural y creemos que ahí reside nuestro acierto, porque se nota que es real. Es verdad que algunas veces el discurso así entra mejor que haciendo críticas en tono más grave, pero el humor en las letras también es un arma de doble filo. Desgraciadamente hay veces en que el sentido del humor de alguna forma devalúa la credibilidad del resultado, como si por ser gracioso fuese menos serio o riguroso. Por eso nos preocupa tomarle bien la medida.
Tenéis otras canciones más basadas en lo cotidiano como ‘Puede ser divertido’ o ‘Vitaminas’ pero también vienen con su carga de profundidad. ¿Todo tema debe tener su mensaje? Sí, nos aburren las canciones vacías y ya se han escrito muchos temas de amor, por eso nos gusta hablar de temas cercanos, que nos afectan personalmente y con los que la gente se pueda sentir identificada, al igual que nos ocurre a nosotras.
Se ha hablado mucho sobre la ausencia de mujeres en los carteles de ciertos festivales, ¿depende de los géneros musicales?
¿Qué proyectos de futuro tenéis? Ahora mismo estamos componiendo y creando nuevas canciones, aunque todavía no hemos definido qué forma le daremos a este material.
¿Qué conocéis del País Vasco? Hemos tocado anteriormente en Donostia y también en Bilbao, ¡pero siempre nos quedamos con ganas de repetir! Texto de Roberto González. Fotografía de Petrarca Photography.