EGB vs ESO, según Bea Tormo
Las notas, los compañeros, los amores de instituto, los sufridos profesores…La dibujante logroñesa Bea Tormo, también conocida como Triz, satiriza los cambios en el mundo estudiantil a través de dos generaciones de chavales en el libro “EGB vs ESO”, de Planeta DeAgostini. La autora también ha colaborado con la revista El Jueves y ahora con la publicación digital Orgullo y Satisfacción, además de realizar ilustraciones para libros y participar en el blog colectivo Caniculadas (http://caniculadas.blogspot.com.es/)
En El Jueves estuviste dibujando una serie sobre los Erasmus y ahora editas un libro sobre “EGB vs ESO”, ¿qué tienes con el tema de la educación? Y he sacado un cómic con las “Caniculadas” que se llama “Institutos” y pongo dibujos a una colección de libros sobre adolescentes…Quisiera saber que tiene la gente con que yo haga cosas sobre educación. Casi todo es por encargo, así que yo no tengo fijación alguna sobre el tema. De hecho estoy deseando hacer otra cosa. Por favor.
¿Qué tipo de estudiante eras? Horrible. Me costaba mucho memorizar cualquier información. Era de esas estudiantes que no hablan en clase, no levantan la mano y encima sacando siempre la nota justita para aprobar. Hubo profesores que nunca llegaron a aprenderse mi nombre.
¿Qué querías ser de mayor? ¿Dibujante u otra cosa? Yo siempre quise ser dibujante. Tuve una época que decía que quería ser veterinaria, pero fue porque me cansé de que la gente me dijese “eso de dibujar es un hobby muy bonito, pero dime que quieres ser de verdad”.
¿Cuál es tu mejor recuerdo del instituto? Creo que sólo saqué una cosa buena de allí y fue una amiga que sigue a mi lado desde entonces. Mi mejor recuerdo es el día que terminé el instituto y entré en la escuela de artes.
¿Y el peor? Todo el instituto es mi peor recuerdo.
Dices que tú has vivido tanto la EGB como la ESO por los pelos, ¿notaste mucho el cambio? Yo fui de la ESO. No sé si el primer o segundo año. No noté nada destacable del cambio. Sólo vi a profesores cansados, con pocas ganas de enseñar y muchas de que memorizases todo tal cual estaba en el libro. No sé si es algo exclusivo de la ESO o ya pasaba en la EGB.
El profesor que une a las dos generaciones en el libro es muy sufridor, ¿te parece duro el papel de los educadores? El profesor que dibujo está ya cansado de tantos años, de tanto alumno cabrón y de tanta reforma de educación. El papel de los educadores me parece bastante duro, tienen que adaptarse, hacerse entender, lidiar con alumnos y padres… También los hay que están hartos y no enseñan nada. Yo guardo cero recuerdos buenos de mis profes del instituto, y eso es preocupante.
La conclusión inevitable del libro es que los jóvenes de ahora son más descocados, ¿es mejor o peor que la inhibición/represión de antaño? No lo sé. A mí lo que me preocupa es la falta de respeto hacia los demás. Cuando era adolescente era gilipollas, como todos. Pero si un adulto me llamaba la atención se me caía la cara de vergüenza. Me habían enseñado que podía hacer lo que quisiera pero que no molestase al resto con mis anormalidades super-hormonadas.
¿Los móviles han acabado con la buena ortografía? Yo tuve móvil, chat, messenger y en clase los apuntes los escribíamos abreviados. Y escribo bien, tengo mucho cuidado de no cometer faltas. Si se escribe mal es porque no les importa, y punto. Los juegos de rol no hacen asesinos en serie, los móviles no se han cargado la ortografía e internet no mató a tu gato.
¿Crees que han mejorado algo las cosas en la educación o en el ambiente entre los chavales? No creo. La educación es basura, el modelo educacional es una patraña, hay reformas y recortes cada dos por tres y la cosa va a peor. Yo no lo sé con certeza porque no doy clases ni voy al instituto ya, pero el panorama es desolador. Texto de Roberto González.
