Tarque & la asociación del riff. La pureza del rock.
El que fuera líder y fundador de M-Clan llega a Bilbao con la gira de ‘Volumen 2’ la última entrega de su proyecto en solitario con La Asociación del Riff, lanzado en octubre de 2023. Le acompañan los músicos Carlos Raya, Coki Giménez y Chapo González. Aquí le entrevistamos.
Con este formato más reducido de Tarque, seguís sonando como una apisonadora. ¿Cómo ha sido este cambio? Ha sido brutal. La idea de Tarque surgió hace unos años por una necesidad mía de volver al hard rock, M-Clan había evolucionado ya hacía tiempo y con esto, intenté volver a un formato básico de las bandas de rock de los años 70 como Led Zeppelin. Bajo, guitarra y batería con la voz, no quería más; es más austero en cuanto a instrumentación, me parece más puro.
¿Cómo ha sido seguir trabajando con tu gran amigo y músico Carlos Raya? Fue con él, con Raya, con quién desarrollé Tarque & La Asociación del Riff… ¡y llevamos media vida trabajando juntos! (risas) Llevamos dos discos, ‘Tarque’ y ‘Vol. 2’ y está funcionando muy bien. Es una formación tan clásica que puede ser hasta novedosa, no es lo que se hace en cuanto a estilo. Intentamos tener un sonido potente y muy puro.
¿Qué te expresan los fans de M-Clan? No lo sé, no conozco a todos (risas). M-Clan es una banda que lleva tocando 30 años y hay una parte que le gusta mucho este nuevo sonido casi primigenio que hacemos con Tarque. Hay otro público más estándar y mayoritario que prefiere las canciones más mainstream de M-Clan, por ser un grupo más amable en cuanto a canciones. Sigue habiendo gente a la que le gusta el rock y ahí estamos nosotros, simple y llanamente.
¿Comenzaste a escribir canciones solo o con los músicos? Raya y yo componemos todos los temas, teníamos ideas, yo también toco la batería y él la guitarra. Nos juntamos y empezamos a crear los temas con electricidad, no con guitarras acústicas, ya que te lleva hacia otro lugar. Siempre partimos de una base de riffs y más eléctrica que lo hace todo más potente. Con Coki y Chapo redondeamos los temas en cuanto a arreglos. Pero no hay una producción. Lo que suena en el local de ensayo luego se graba; los cuatro en directo se graba y ya. Vas a ver en el escenario exactamente lo que vas a oír en el disco, esa era nuestra reivindicación, no la sobre producción. ¡Vamos a sacar un single de un directo y suena exactamente igual que el disco! Queremos mantener la pureza del rock.
¿Y tu relación con Raya? Lleváis toda la vida tocando juntos. Le he admirado siempre mucho. Le perdí la pista y ya en M-Clan tocó con nosotros. Tenemos mucha afinidad, venimos de la misma raíz musical. Para mí es un privilegio y él llega a lugares donde yo no puedo llegar.
¡Y hacéis los ensayos en su casa que tiene el estudio! Tiene uno de los mejores estudios de grabación de España, no es juntarnos en mi garaje con unos altavoces (risas). Y los músicos, Coki y Chapo, ya tienen un nivel que con un día de ensayo nos vale. Sin duda, la banda -más allá de mí- son los mejores músicos de España.
¿Cómo es un día normal en tu vida? Me gusta vivir de manera tranquila, veo conciertos pero necesito desconectar. Es verdad que escribo cosas siempre, pero a veces me tiro un mes sin hacer nada, es necesario.
«Siempre partimos de una base de riffs y más eléctrica que lo hace todo más potente. Con Coki y Chapo redondeamos los temas en cuanto a arreglos. Pero no hay una producción. Vas a ver en el escenario exactamente lo que vas a oír en el disco, esa era nuestra reivindicación, no la sobre producción. ¡Vamos a sacar un single de un directo y suena exactamente igual que el disco! Queremos mantener la pureza del rock».
¿Qué te habría gustado ser si no fueras músico? Algo artístico y creativo, desde niño me gustaba pintar y dibujar; la música vino después. Yo soy músico porque eran fans de la música, no porque me dieran un instrumento. No sé leer música, soy un poco gañán en ese sentido (risas).
¿Te queda algo por vivir como músico? Seguir haciendo música. El que es músico, lo será siempre. Cuando empiezas, necesitas poder permitirte vivir de la música. Tienes una efervescencia y ansiedad que cuando lo consigues, ya puedes tomártelo con más calma.
Cuéntanos cómo fue para ti escuchar a AC/DC de niño. Tengo 55 y los descubrí con 11 (risas), ¡imagínate! Pero sigo sintiendo cosas especiales al escucharlos. Me recuerdan a toda mi vida, nunca he dejado de escucharlos.
¿Qué bandas nos recomiendas? No escucho mucho rock duro ni heavy, me gusta el rock, el country y el folk americano y británico. Peco de anglosajón en ese sentido, no escucho música de aquí o no escucho mucho flamenco, siempre he mirado hacia afuera. ¡Yo crecí con el rock! Me encantan Rival Sons, es de lo último que he escuchado. Los Sheepdogs son una banda que me gusta mucho. Y podría decirte también los Lemon Twigs, hacen una especie de pop de los 60.
Consejo que darías a una banda que no sabe por dónde tirar. No soy amigo de dar consejos porque igual no valen (risas). Pero un grupo no debe estar obsesionado por el éxito y más en esta época que vivimos ahora que parecen más importantes los likes que la esencia de lo que estás haciendo en sí. La banda debe pasárselo bien siempre, si no no funciona. Igual funciona comercialmente, pero va a ser un castigo para ti. De irradiar esa felicidad o ese divertimento es cuando va a salir algo creativo y todo va a fluir, la gente lo va a sentir así. ¡La diversión y el pasarlo bien es mi consejo! Texto de Ángela Saiz.