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March 19, 2024

Smile. En busca del rayo verde.

Smilefotos

John Franks es conocido en Getxo por ser el cantante británico de la banda Smile. Llevan entre discos y escenarios desde el 2007. Al principio, el público los conoció por sus temas con toques sixties, más clásicos. Son el perfecto ejemplo de buen rollo, ganas de bailar y melodías pegadizas. Ahora cantan en castellano.

Háblanos del lanzamiento del álbum, ‘Rayo Verde’ después de años sin publicar. ¡Había ganas! El anterior fue en el 2017. Antes de la pandemia, sacamos un EP con la primera canción en castellano como adelanto, la de ‘Pum Pum Pum’ con DePedro. Como yo soy de origen británico, mis influencias han sido siempre en inglés. Los discos que tenía en casa con mis padres eran en inglés y no tenía muchas referencias en castellano, la verdad. Nunca me había planteado hacer música en castellano. Es verdad que nos dimos cuenta de que el idioma estaba siendo un hándicap para la banda. Apenas hay grupos en inglés aquí… y, por supuesto, no hay uno al que le vaya bien cantando en inglés (risas).

¿Lo dices de verdad? Pensé que os diferenciabais exactamente por eso... Sí, pero para escuchar música en inglés, ya tienes a los grupos americanos, ingleses y a todos las bandas que vienen de fuera. La gente ha entendido que el panorama nacional es en castellano, es el idioma que te corresponde. Es cierto que en los 90 hubo gente como Dover que se diferenció y triunfó cantando en inglés. Pero ha ido pasando el tiempo y se ha complicado. Nosotros en algún momento teníamos que hacer el cambio. A mí me costó.

¿Habéis llevado bien el cambio al español? Podría haber sido un suicidio artístico. Pero la gente lo abrazó y se lo tomó como algo natural. Desde ahí, empecé a hacer canciones en castellano y ya me convencían más. En la pandemia hicimos ‘Una y otra vez’ (que tiene un millón de reproducciones en Spotify) y fue en un momento en el que las redes sociales se pusieron más de moda. Comunicábamos todo por ahí y tuvimos mucho seguimiento. Funcionó muy bien. Ahí nos dimos cuenta y empezamos a hacer todo en castellano.

¿Qué referentes tienes ahora, musicalmente hablando, en castellano? Bandas que he visto, como Jero Romero que tocaba en Sunday Drivers y se puso en solitario a hacer canciones en castellano. Escuchar a Sidonie o a bandas que de repente me gustan. Tengo afinidad con ellas. El subconsciente tiene en cuenta a esos grupos que me gustan y me ayudan a buscar mi propio camino. ¡De manera natural, ya me salen las canciones en castellano! Las métricas son más fáciles de encajar en inglés; el castellano tiene esa dificultad, pero poco a poco he ido mejorando. Me pone contra las cuerdas, es emocionante. ¡Me gusta!

«¡De manera natural, ya me salen las canciones en castellano! Me pone contra las cuerdas, es emocionante. ¡Me gusta!».

¡Háblame del «Rayo Verde»! Cuando tienes un disco, hay que buscar siempre un buen título. A veces es difícil. Un día cayó en mis manos la definición de qué era el «rayo verde» y me enamoré. «El rayo verde tiene la virtud de hacer que aquel que lo ha visto no pueda jamás equivocarse en las cosas del corazón; su aparición destruye las ilusiones y las mentiras; y el que ha tenido la dicha de verlo solo una vez, ya puede ver claro en su corazón, y en el de los demás. […] Este verde es, sin duda, el verdadero verde de la esperanza y del amor». Así explica Verne qué es el rayo verde. Es una descripción poética, romántica que encaja con Smile: sol, mar, rayos, sunset.

Fuisteis sacando sencillos a goteo, poco a poco, ¿cierto? Ahora mismo, el bombardeo musical es enorme. Es imposible estar a la altura. Hay más oferta que demanda. Si tú a una canción le quieres dar el interés y reconocimiento que merece, debes sacarla individualmente, con su clip y sus tiempos. En un disco, la gente se escucha el single y ya. Queríamos dar a cada canción su propia importancia. Nos ha funcionado muy bien. De cinco adelantos del disco, cuatro son las canciones más escuchadas en Spotify. ¡Es la mejor manera de hacerlo!

Este álbum tiene hits alegres, como siempre hace Smile, pero también temas tristes. Parece que la gente no se detiene en las canciones tristes… pero siempre hemos tenido esa dualidad. Igual ahora en castellano se fijan más (risas). Siempre hemos tenido canciones más reflexivas y profundas. Nuestro optimismo viene de la reflexión, no es solo ese buen rollito superficial. Esos temas vienen de mirarse hacia adentro. Parece que ha trascendido mucho más esa parte nuestra más de playa y más alegre… ¡Pero somos muy fans de esas canciones más profundas y nos da pena que se queden atrás! Texto de Ángela Saiz. Fotografía de Anton Uribe.

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