‘Deseo carnal’ de Alaska y Dinarama, según MARCOS GENDRE.
En su nuevo libro el periodista Marcos Gendre echa la vista atrás para recuperar uno de los discos clave de la historia de la música popular en España, el ‘Deseo Carnal’ de Alaska y Dinarama. Un hito musical que marcó toda una década y cuyas canciones aún resuenan en el imaginario colectivo. Charlamos con el autor para saber más sobre el mítico álbum.
¿Qué motivo te ha llevado a echar la vista atrás y escribir un libro sobre un disco de mediados de los años ochenta y el panorama musical de la época? Lo que me llevó a eso fue la necesidad de remarcar varias cuestiones relevantes que, en la mayoría de ocasiones, pasan desapercibidas, como la función social que tuvo a la hora de visibilizar la comunidad gay del momento y, sobre todo, a gente que, tal como me relataban, pudieron salir del armario gracias a este disco.
Pero esta es solo una de muchas cuestiones que surgen de aquella explosión creativa que, más de tres décadas después, sigue siendo de gran influencia y que, en este libro, esta expuesta a través de algunas de las mentes más brillantes del pop español, herederos directos de toda la sabiduría concentrada en este LP.
¿Cómo surgió un disco así? ¿Fue una serie de coincidencias afortunadas que se juntara gente de tanto talento en un momento especialmente creativo o desde un principio la idea fue la de crear un trabajo que acabara siendo la obra cumbre de un tiempo? Pues yo lo entiendo como una mezcla de estas dos cosas, aunque mucho más como el hecho de encontrarse de repente con un presupuesto que les permitió dar alas a su ambición. Por supuesto, Canut y Berlanga ya se conocían desde la infancia, en sus años en Valencia, y la casualidad de que se encontraran con Olvido Gara fue muy importante, aunque por los círculos que frecuentaban, en realidad, bastante endogámicos, estaban condenados a cruzarse en el camino. Aunque, por supuesto, no tenía por qué haberse dado como fue.
¿Puede considerarse ‘Deseo carnal’ la cima creativa de todo un movimiento musical que definió una época y un lugar o fue más bien algo ajeno a las diferentes corrientes musicales que se desarrollaron en España en aquellos años? ‘Deseo carnal’ fue la consumación y broche de oro a los años de la Movida, que realmente había vivido su edad dorada hasta justo el año anterior. Sí fue la cima creativa de todo un movimiento musical, casi diría que más bien fue el kilómetro cero de toda una estirpe de pop desprejuiciado cantado en castellano que vino a lo largo de las décadas siguientes.
Calidad aparte, ¿Cuál sería la característica principal de las canciones del disco para que sigan teniendo ese carácter tan universal y atemporal? La característica principal es tan sencilla como inapelable: se trata de canciones que aúnan ambición, clarividencia y litros de inspiración como ningún otro disco pop facturado en España hasta el día de hoy. Canciones como ‘Ni tú ni nadie’ se han convertido en himnos para toda aquella generación y las venideras, aparte de que, a día de hoy, cortes como ‘Falsas costumbres’ y ‘Cómo pudiste hacerme esto a mí’ siguen siendo el faro-guía de toda la liturgia berlanguiana.
Hace ya más de treinta y cinco años que el disco ‘Deseo Carnal’ vio la luz, ¿ha habido desde entonces algún fenómeno en la música popular hecha en España que pueda ser de algún modo comparable? A nivel de eco, ambición e inspiración, no. Pero tampoco creo que se trate de comparar. Se trata de diferentes contextos y épocas. Se podría hablar en la actualidad de Rosalía, pero, con todos mis respetos, sus logros no son comparables con la dialéctica universal pop gestada por Canut y Berlanga, capaces de convertir un bolero en pop de cinco estrellas y mirar de tú a tú al Bowie glam de los setenta, por medio de ‘Falsas costumbres’. Texto de David Tijero.